Parece que el Departament d'Ensenyament de la Generalitat de Catalunya se lía la manta a la cabeza y establece un plan dirigido a la acreditación del dominio de las nuevas tecnologías por parte del profesorado (véase noticia en La Vanguardia, Los docentes deberán acreditar un dominio de las nuevas tecnologías). Dicho así, no suena mal. Perseguir que el cuerpo docente tenga un dominio aceptable de las TIC en los tiempos que corren debería ser una obligación por parte de cualquier administración educativa que se precie. En eso estamos de acuerdo. Otra cosa son las formas y que existan otras prioridades.
Y es que vamos a ver cómo se lleva a cabo la propuesta. Porque no estamos para perder el tiempo. Si la cosa se va a convertir en cursos de puro trámite para obtener el titulito oficial que pase a engrosar el currículum docente, pues mejor nos lo ahorramos. Está por ver también qué contenidos van a trabajarse y, sobre todo, cómo y quién va a impartirlos. Porque por un lado nos encontramos con estas noticias en la prensa y, por el otro, me consta que en más de un centro de adultos de titularidad autonómica existen decenas de profesores que imparten los cursos de CompeTIC sin tener la acreditación necesaria para ello. Está pasando, así que un poco de criterio y de coherencia en este ámbito no vendría nada mal.
Pero, sobre todo, lo que más me chirría del asunto es el hecho de estar pasando por encimas de las verdaderas urgencias del sistema, al menos como yo lo veo. Insisto en la necesidad de acreditar las competencias digitales del profesorado. O, mejor dicho, insisto en la necesidad de que los docentes sepamos manejarnos en el mundo digital. Porque una cosa es tener un título en competencia digital y otra muy distinta tener el conocimiento necesario para desenvolverse con soltura en la red. En cualquier caso, ¿nadie en el Departament se plantea que existen otras urgencias mayores?
Pienso, especialmente, en los procesos de selección y de formación del profesorado, a mi entender uno de los auténticos lastres del sistema. Y alguien dirá al leer esto que bueno, eso es otra cuestión. Quizá sí, pero me parece que tiene más sentido dedicar todos los esfuerzos a resolver uno de los grandes problemas del sistema que poner un nuevo parche educativo, eso sí, en este caso moderno y molón. A mi entender la educación es mucho más que el dominio de las TIC, por eso creo que deberíamos priorizar las cosas en función de la urgencia e importancia que merecen. Todos sabemos que muchos claustros están plagados de gente sin la más mínimas actitud y aptitudes para trabajar en la docencia. Por otro lado, está la formación inicial docente, a todas luces mejorable al menos en lo que respecta al profesorado de secundaria, no digamos ya al de adultos.
Dice la directora general de Atención a la
Familia y a la Comunidad Educativa, Meritxell Ruiz, que se está
elaborando un documento que defina las competencias que deberán tener los docentes para incorporar las TIC en el aprendizaje porque ''hay que atreverse'' a decir qué requerimientos se tiene que demandar a los docentes. En mi opinión, a lo que debería atreverse la administración autónomica es a afrontar los verdaderos retos del sistema, ponerse las pilas con las verdaderas urgencias y dejar los parches para otra ocasión. Además, aquí no hay excusa porque tenemos competencias en educación, ¿verdad? En fin, me temo que los intereses del Departament van por otro lado. Eso sí, de aquí a poco tendremos otro título oficial que llevarnos al currículum. Pues nada, ¡uno más!
PD: Te recomiendo la lectura del interesante artículo de xarxatic al respecto, Los docentes deberán acreditar competencia digital.
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Què tal?
ResponderEliminarNo m’agrada la iniciativa de Departament, t'ho haig de dir. Com sempre, arriba tard i malament. Fent ús de nom del teu article, només servirà per tenir un títol més i prou. I continuem formant als docents amb pegats, va! Això no és formació de qualitat, és autoenganyar-nos tot plegats com ho hem fet sovint amb això de les TIC. A més, hi ha docents i centres que les utilitzen. Vol dir que sense aquest títol s'invalida tota la bona feina feta fina ara?
D'altra banda, l'obtenció d'aquest títol no tindrà cap incidència a l'aula si només serveix per ensenyar el funcionament de recursos TIC a seques. Abans d'aplicar les TIC s'hauria de fer una bona diagnosi per copsar les necessitats dels docents en aquest camp, però també les dels alumnes. És a dir, de què serveix fer ús de Moodle entre els alumnes si no saben ni fer un treball amb un processador de text? I enviar-lo per correu no diguem ja! Cal, doncs, analitzar bé com s'utilitzen les TIC, les necessitats reals i els recursos que funcionen o no.
Val a dir també, i parafrasejant en XarxaTIC, s'ha de desconfiar de la tecnologia que es vol vendre com a innovadora. Darrere d'aquests plans, com el CompeTIC, solen haver negocis dubtosos en què equipaments de determinades marques i software són venuts com la salvació de l'educació.
Per acabar, el departament ha de deixar d'entonar els cants de sirena de les TIC i apostar ben fort per actualitzar la millor eina que si pot canviar l'educació: el professor. Cal invertir en una formació permanent del professorat coherent, lluny de cursos i cursets, que doni pes a la reflexió de la tasca docent com a motor de canvi. Perquè només qúestionant què fem a l'aula, com ho fem i què utilitzem serem capaços de portar l'educació al nivell següent.
Gràcies per obrir el tema!
Molta raó, Josep Miquel. És per això que considero prioritari centrar-nos en les veritables urgències i de deixar-nos de pegats i de xapusses constants. És un fet que cal revisar el procés d'accés a la tasca docent, així com la formació inicial del professorat. A partir d'aquí i endreçat el tema dediquem esforços a altres temes com les TIC o l'anglès (aquesta és una altra). En fi, seguim. Moltes gràcies per passar-te per aquí! Ens veiem aviat! :-)
EliminarParche sobre parche, diría yo. Vende mucho por lo 'cool' que parece lo de las TIC, pero seguro que podríamos enumerar al menos una veintena de urgencias más importantes en el sistema (selección del profesorado y formación, como tú bien dices, así como un seguimiento al profesorado que, ya sea porque es funcionario o porque tiene un número de interino muy bajo, año tras año coge bajas desde el inicio del curso (ya sean bajas reales o simbólicas al estar sólo de cuerpo presente en las aulas).
ResponderEliminarPor otro lado, me encantó el concepto de 'improvisar' de tu anterior post. Algo de lo que tanto hemos hablado, y de cómo impacta muy positivamente en el interés y motivación del alumnado. Me vino a la cabeza la unidad didáctica sobre ideogías políticas en EEUU en plena campaña Obama Vs. Romney. Los agradecimientos de los estudiantes al finalizar el curso hicieron que todo el esfuerzo de programar y búsqueda de materiales 'sobre la marcha' tuvieran una total recompensa.
Sigue organizándonos las ideas y conceptos edicativos en la cabeza maestro. Da gusto leerte.
Abrazaco!
Pues sí, amigo. Hay mucho escaqueado y mucho mangoneo por los claustros de Dios y parece que muy poca voluntad de corregir situaciones de injusticia flagrante. Además, es evidente que la situación de los interinos no está entre las prioridades del Departament. Por otro lado, creo que es clave acercar los contenidos que trabajamos con lo que pasa en la calle y, en ese sentido, el trabajazo que hiciste en Collingswood es un claro ejemplo de ello.
EliminarEncantado de que te pases por aquí. Vente más a menudo a comentar la jugada! 😉
Abrazaco de vuelta!
Muy buena reflexión, Ramón. Alucino con el método para imponer la competencia digital en el profesorado. Estoy de acuerdo contigo en que hay muchas prioridades en educación que requerirían de una respuesta más urgente. Un saludo
ResponderEliminarHola Alberto! Pues sí, bastante alucinante. Pero parece que estamos instalados en el parchismo constante. En fin, seguiremos. Empezamos otro curso. Espero tenerte por aquí de vez en cuando. Ya sabes que siempre es un placer! Un abrazo!
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