jueves, 12 de junio de 2014

Diverxo y el marketing docente

El otro día escuché la entrevista que Iñaki Gabilondo realizó en su espacio Conversaciones con Iñaki... al aclamado David Muñoz, chef del restaurante madrileño Diverxo, recientemente galardonado con su tercera estrella Michelin. No me sorprendió demasiado lo que oí, ya que últimamente he tenido el gusto de ver o leer varios espacios en los que el joven chef explica las claves de su visión de la cocina, de su profesión y de la vida en general.

Es Muñoz (o al menos a mí me lo parece) un tipo que conecta con el público. Transmite la pasión por su profesión de una manera directa y evidente, sin filtros de ninguna clase. Muestra una total convicción en su trabajo, en su concepto de la cocina y parece tener muy claro qué quiere y cómo quiere conseguirlo. Es, de hecho, un gran seductor. Pero, además de sus (deduzco) enormes habilidades profesionales (habrá que ahorrar y reservar mesa para comprobarlo de primera mano), en mi opinión  Muñoz destaca por encima de todo en un aspecto: su capacidad para elaborar un discurso, lo que un buen amigo llama el relato. Y no me refiero simplemente a oratoria. Es algo más. Se trata de la capacidad de pensar (y comunicar, por supuesto) experiencias sugerentes y de calidad que van más allá de un buen trozo de carne o de un plato más o menos sofisticado.


Richard Gerver, en su clásico-moderno Crear hoy la escuela del mañana, habla de la necesidad de "vender" la escuela al alumnado, de hacerla sugerente, atractiva. Este concepto, que puede chirriar a ojos de muchos docentes cuando se asocia al ámbito educativo, resulta fundamental según el profesor británico para conseguir llamar la atención del alumnado y conectar los centros educativos con sus verdaderos intereses y motivaciones. Se trataría, pues, de elaborar un relato propio al estilo de Muñoz en Diverxo (perdóneseme la licencia) para ofrecer un aprendizaje de calidad de una manera creativa, para hacerlo "dinámico, interesante y dotado de relevancia".

¿Cómo hacerlo? Eso ya es otra historia, claro... Gerver propone dos grandes preguntas para crear esta identidad propia. La primera, ¿qué representamos a ojos de nuestro alumnado?; y, por otro lado, ¿qué pasos damos cada día para reforzar nuestra identidad y, en definitiva, nuestro relato? La respuesta a ambas puede permitir afrontar el desafío de aproximarnos a nuestra "clientela" particular. Porque, como leemos en Crear hoy la escuela del mañana, si pensamos que nuestros alumnos van a asistir a la escuela y a aprender porque es la ley o porque (les decimos que) lo necesitan estamos apañados...

Os dejo con los mejores momentos de la entrevista de David Muñoz en Viajando con Chester. Para más reflexiones gastronómico-educativas clica aquí.

2 comentarios :

  1. Ramón, yo también escuché esta entrevista, aunque debo admitir que no conocía al personaje en sí. Me viene muy bien tu entrada y tus reflexiones para hacerme una idea más completa y relacionarlo con aspectos educativos. Saludos y ¡¡enhorabuena!! Fernando

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Fernando! Pues sí, su energía es contagiosa. Creo que hay cosas muy interesantes que aprender. Un placer tenerte por aquí! Saludos!

      Eliminar